martes, 8 de septiembre de 2009

Grandes Momentos del Cine:"Teléfono Rojo: Volamos Hacia Moscú"

Repetimos con Kubrick en la sección de grandes momentos cinematográficos, y seguramente no vaya a ser la última.En esta ocasión, le toca a "Teléfono rojo volamos hacia Moscú" (1963), la única comedia dentro de la filmografía de Stanley Kubrick que consistía en una divertida y a la vez escalofriante sátira acerca de la guerra fría y el riesgo y responsabilidad que supone el uso de armas atómicas en la industria bélica .

La secuencia de la Coca-Cola
Muchas veces he pensado en ello y me ha entrado un escalofrío.el mero hecho de pensar que el destino de la humanidad está en manos de seres humanos y que todo pueda saltar por los aires por un error o una decisión humana equivocada.Ya concretando, para poneros en contexto con la secuencia que hoy os ofrezco,en Teléfono Rojo,Kubrick cuenta la historia de un general (Sterling Hayden) que convencido de que los comunistas están contaminando a la nación americana, ordena, en un acceso de locura, un ataque aéreo nuclear por sorpresa sobre la Unión Soviética. Su ayudante, el capitán Mandrake (Peter Sellers), trata de averiguar el código para detener el bombardeo.El general es el único que tiene el codigo para poder comunicarse con el bombardero y poder cancelar el ataque nuclear contra los rusos pero se suicida ante los ojos de Mandrake. Para solucionar el problema,Mandrake intenta ponerse en contacto personalmente con el presidente de los EE. UU. para que solucione el asunto por la ultima via posible,la diplomacia ,convenciendo al presidente ruso de que todo se trata de un estúpido error y asi evitar una tercera guerra mundial.En este momento,en nuestra secuencia,se da lugar una situación de total desgobierno ,de falta de entendimiento e incomprension jerárquica,una muestra evidente de como la burocracia fruto del vano intento humano por querer controlarlo creando el efecto contrario,puede significar el final mas estúpido de la humanidad y como una insgnificante máquina de bebidas de la omnipresente marca Coca-Cola sirve de vía de escape para desatascar momentaneamente la situación traspasando la frontera del absurdo.Absolutamente magistral.


Seguramente mas de uno , si tuviera que elegir una de las secuencias de la pelicula, se hubiera quedado con la mas famosa de todas ellas, la mítica secuencia del cowboy cabalgando sobre la bomba atomica o quizas con el apocaliptico videoclip final adornado con la cancion "Will meet again" sobre una sucesión continua de explosiones atomicas.Pero yo me quedo con esa, por su comicidad e ironia y porque de alguna manera me recuerda situaciones de incompetencia laboral que podemos constatar dia a dia en nuestro trabajo o en el trabajo y organización de otras empresas publicas y privadas gobernadas por seres humanos....Al fin y al cabo un estado o un gobierno es una empresa mas, con sus incompetencias, gestiones y errores humanos,con decisiones basadas en principios subjetivos pero con consecuencias mas graves y responsabilidades mas enormes, de las que los gobiernos deben ser conscientes.





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